Menos mal que la mayoría de la gente es prudente, pues no quieren arriesgarse a que les atropelle un vehículo si viene al centro de la rotonda para estar más cerca de mí, en el Monumento conmemorativo de la Fundación. De todas maneras, como si los oyera, me preguntan, ¿qué podemos ver en este pueblo? Y yo les digo a todos.
El Palacio de la Subdelegación, actual Ayuntamiento, que se construyó entre el 1770 y 1780.
La Plaza de la Iglesia, donde se haya la Iglesia de la Purísima Concepción, y la antigua cárcel, ahora Biblioteca Municipal, de estilo neoclásico
La Real Posada o Real Casa de Postas, que fue concebida para servicio de viajeros, comerciantes y los animales necesarios para la carga y transporte de mercancías.
Y también como muchos se interesan por las fiestas, así que les recomiendo venir: en febrero, a participar en las fiestas la Candelaria.
Como es natural, el 15 de mayo, ir a la Romería San Isidro al Monte de Las Pinedas
Y si es entusiasta de las diversiones que se programan, participar el 5 de julio en el Día de la Colonización.
Y por último, disfrutar de la Verbena del Emigrante, el 28 de agosto.
